Risotto cremoso con hongos secos

1. Hidratación de los hongos secos:
   Comienza colocando los hongos secos en un recipiente con agua tibia. Déjalos reposar durante al menos 20 minutos para que se rehidraten. Una vez listos, cuela los hongos, reservando el agua de hidratación, ya que será parte del caldo del risotto. Pica los hongos en trozos pequeños.

2. Preparación del caldo:
   En una olla aparte, calienta el agua reservada de los hongos junto con el caldo de verduras. Mantén el caldo a fuego bajo para que se mantenga caliente durante toda la cocción del risotto.

3. Sofrito base:
   En una sartén profunda o una cacerola, derrite 2 cucharadas de manteca junto con un chorrito de aceite de oliva. Agrega la cebolla picada en brunoise (cubos pequeños) y el ajo finamente picado. Cocina a fuego medio hasta que estén tiernos y translúcidos, sin que lleguen a dorarse.

4. Incorporación del arroz:
   Añade el arroz al sofrito y cocina por 2-3 minutos, removiendo constantemente para que los granos se impregnen de los sabores y se tornen ligeramente translúcidos.

5. Deglaseado con vino blanco:
   Vierte el vino blanco y cocina hasta que el alcohol se evapore, removiendo continuamente para evitar que el arroz se pegue. Esto tomará aproximadamente 1-2 minutos.

6. Cocción del risotto:
   Comienza a agregar el caldo caliente de a poco, un cucharón por vez, removiendo frecuentemente para que el arroz libere su almidón y el risotto adquiera una textura cremosa. Espera a que el líquido se absorba antes de añadir más caldo. Este proceso lleva entre 18-20 minutos.

7. Añadir los hongos:
   Aproximadamente a mitad de la cocción, incorpora los hongos rehidratados al arroz. Esto permitirá que los sabores de los hongos se mezclen bien con el resto de los ingredientes.

8. Finalización y cremosidad:
   Cuando el arroz esté al dente, retira del fuego y añade la manteca restante, el queso parmesano rallado y la crema de leche. Mezcla bien para lograr una textura aún más cremosa. Rectifica la sal y agrega pimienta a gusto.

9. Reposo y presentación:
   Deja reposar el risotto durante 2 minutos antes de servir. Decora con perejil fresco picado y, si lo deseas, con un poco más de queso parmesano rallado.

Consejos para un resultado perfecto:

• Utiliza arroz tipo carnaroli o arborio, ideales para lograr la textura cremosa del risotto.
• Remueve con frecuencia para evitar que el arroz se pegue al fondo y para liberar el almidón que da cremosidad al plato.
• Sirve el risotto inmediatamente después de prepararlo para disfrutarlo en su mejor punto de textura y sabor.